Esas manos, delicadas que se aferran con fuerza a unos de los vagones del metro, son las mismas que las tuyas. Son las mismas uñas que calaron las grasitud en el barrote de aluminio..? Estación escuela militar y todos a bajar, te seguiria el rastro como un curioso animal, pero se nos cruzaron las autopistas. Con el cruce de tu bolso, el saco verde de lana gruesa y cuadriculados pantalones grandes, no pude evitar mi curiosidad.
Pá...!!! ya entraste en el vicio... de viaje.
29.Apr.04 16:38:20 | Beduino