Las cosas se han de hablar en su momento oportuno, de lo contrario se convierten en murciélagos abandonados en la oscuridad. Ser saco de huesos portador de ansiedades mudas sin ser escuchadas por quienes eran merecedores. Aprender a hablar es tan importante como darse cuenta de que muy pocas veces se dice lo que se siente, tengo que aprender a hablar. Una palabra cambia una historia en curso en cambio a una historia hecha una palabra ya no tiene sentido.